10 hábitos de los estudiantes altamente efectivos
por Becton Loveless
La clave para convertirse en un estudiante efectivo es aprender a estudiar de forma más inteligente, no más dura. Esto es cada vez más cierto a medida que se avanza en la educación. Una o dos horas de estudio al día suelen ser suficientes para pasar por el instituto con notas satisfactorias, pero cuando llega la universidad, no hay suficientes horas en el día para estudiar todo si no sabes cómo estudiar de forma más inteligente.
Aunque algunos estudiantes son capaces de pasar por la escuela con un esfuerzo mínimo, esto es la excepción. La gran mayoría de los estudiantes exitosos logran su éxito al desarrollar y aplicar hábitos de estudio efectivos. Los siguientes son los 10 principales hábitos de estudio empleados por los estudiantes de gran éxito. Así que si quieres convertirte en un estudiante de éxito, no te desanimes, no te rindas, simplemente trabaja para desarrollar cada uno de los hábitos de estudio que te presentamos a continuación y verás cómo tus notas suben, tus conocimientos aumentan y tu capacidad de aprender y asimilar información mejora.
No intentes atiborrar todo tu estudio en una sola sesión.
¿Te has encontrado alguna vez despierto hasta altas horas de la noche gastando más energía intentando mantener los párpados abiertos que estudiando? Si es así, es hora de cambiar. Los estudiantes de éxito suelen espaciar su trabajo en periodos de tiempo más cortos y rara vez intentan atiborrar todo su estudio en una o dos sesiones. Si quieres convertirte en un estudiante de éxito, tienes que aprender a ser constante en tus estudios y a tener periodos de estudio regulares, aunque más cortos.
Planifica cuándo vas a estudiar.
Los estudiantes de éxito programan momentos específicos a lo largo de la semana en los que van a estudiar, y luego se ciñen a su horario. Los estudiantes que estudian de forma esporádica y caprichosa no suelen rendir tanto como los que tienen un horario de estudio fijo. Incluso si estás al día con tus estudios, crear una rutina semanal, en la que apartes un periodo de tiempo unos días a la semana, para repasar tus cursos te asegurará desarrollar hábitos que te permitirán tener éxito en tu educación a largo plazo.
Estudia a la misma hora.
No sólo es importante que planifiques cuándo vas a estudiar, es importante que crees una rutina de estudio diaria y consistente. Cuando estudias a la misma hora cada día y cada semana, el estudio se convertirá en una parte regular de tu vida. Estarás mental y emocionalmente más preparado para cada sesión de estudio y cada sesión de estudio será más productiva. Si tienes que cambiar tu horario de vez en cuando debido a eventos inesperados, está bien, pero vuelve a tu rutina tan pronto como el evento haya pasado.
Cada tiempo de estudio debe tener un objetivo específico.
Simplemente estudiar sin dirección no es efectivo. Necesitas saber exactamente lo que tienes que lograr durante cada sesión de estudio. Antes de empezar a estudiar, establezca un objetivo para la sesión de estudio que apoye su objetivo académico general (por ejemplo, memorizar 30 palabras de vocabulario para superar la sección de vocabulario en un próximo examen de español.)
Nunca procrastine su sesión de estudio planificada.
Es muy fácil, y común, posponer su sesión de estudio por falta de interés en el tema, porque tiene otras cosas que necesita hacer, o simplemente porque la tarea es difícil. Los estudiantes de éxito NO procrastinan el estudio. Si dejas la sesión de estudio para más tarde, tu estudio será mucho menos efectivo y puede que no consigas hacer todo lo que necesitas. La procrastinación también lleva a las prisas, y las prisas son la causa número uno de los errores.
Empieza con la asignatura más difícil primero.
Como tu tarea o asignatura más difícil requerirá el mayor esfuerzo y energía mental, deberías empezar con ella primero. Una vez que hayas completado el trabajo más difícil, será mucho más fácil completar el resto del trabajo. Aunque no lo creas, empezar por el tema más difícil mejorará en gran medida la eficacia de tus sesiones de estudio, y tu rendimiento académico.
Revisa siempre tus apuntes antes de empezar una tarea.
Obviamente, antes de poder revisar tus apuntes, primero debes tener apuntes que revisar. Asegúrate siempre de tomar buenos apuntes en clase. Antes de empezar cada sesión de estudio, y antes de empezar una tarea en particular, revisa tus apuntes a fondo para asegurarte de que sabes cómo completar la tarea correctamente. Repasar tus apuntes antes de cada sesión de estudio te ayudará a recordar la materia importante aprendida durante el día, y a asegurarte de que tu estudio es específico y efectivo.
Asegúrate de no distraerte mientras estudias.
Todo el mundo se distrae con algo. Tal vez sea la televisión. O tal vez sea tu familia. O puede que simplemente haya demasiado silencio. Algunas personas realmente estudian mejor con un poco de ruido de fondo. Cuando te distraes mientras estudias, (1) pierdes el hilo de tus pensamientos y (2) eres incapaz de concentrarte, y ambas cosas te llevarán a estudiar de forma muy ineficaz. Antes de empezar a estudiar, busca un lugar donde no te molesten ni te distraigan. Para algunas personas esto es un cubículo tranquilo en los recovecos de la biblioteca. Para otros es en una zona común donde haya un poco de ruido de fondo.
Utiliza los grupos de estudio de forma eficaz.
¿Has oído alguna vez la frase «dos cabezas piensan mejor que una»? Pues esto puede ser especialmente cierto cuando se trata de estudiar. Trabajar en grupos te permite (1) obtener ayuda de los demás cuando te cuesta entender un concepto, (2) completar las tareas más rápidamente y (3) enseñar a los demás, lo que ayuda tanto a los otros estudiantes como a ti mismo a interiorizar la materia. Sin embargo, los grupos de estudio pueden resultar muy ineficaces si no están estructurados y si los miembros del grupo no vienen preparados. Los estudiantes eficaces utilizan los grupos de estudio de forma efectiva.
Revisa tus apuntes, trabajos escolares y otros materiales de clase durante el fin de semana.
Los estudiantes con éxito revisan lo que han aprendido durante la semana durante el fin de semana. De esta manera están bien preparados para seguir aprendiendo nuevos conceptos que se basan en el trabajo del curso anterior y en los conocimientos adquiridos la semana anterior.
Estamos seguros de que si desarrollas los hábitos señalados anteriormente verás una mejora importante en tu éxito académico.