9 horarios para los acuerdos de custodia de los hijos al 50 %

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Tu divorcio acaba de finalizar y compartes la custodia con tu ex al 50 %. Ahora tienes que ponerte manos a la obra para saber cómo dividir el tiempo que tus hijos pasan con cada uno de vosotros. Tienes que elaborar un calendario que reparta equitativamente el tiempo que tus hijos pasan con cada uno de los padres. En este post, repasamos los principios básicos que hay que tener en cuenta y proporcionamos plantillas específicas para diferentes horarios de custodia 50-50.

Hay dos formas principales de dividir el tiempo. La primera es simplemente alternar días o semanas. La otra es rotar los días que se pasan en cada lugar. Hay 5 variantes del horario alterno, y 4 del horario rotativo.

La elección de un horario de custodia específico depende de una serie de factores, como la edad de los niños, la ubicación del colegio, las actividades extraescolares y la distancia entre los dos lugares. Si viven a más de 30 minutos de distancia, es posible que quiera mantener cada visita más tiempo para reducir la cantidad de tiempo que su hijo tiene que pasar sólo viajando de un lugar a otro.

Con los acuerdos de custodia compartida, es importante mantener un dormitorio y un espacio totalmente funcional en cada casa. Lo ideal es intentar duplicar los objetos más importantes para que estén disponibles en ambos lugares. Si las estancias prolongadas se producen en dos casas diferentes, no querrá que sus hijos sientan que no tienen un hogar porque están arrastrando sus cosas favoritas de un lado a otro en cada visita. Su objetivo debe ser hacerles sentir que ahora tienen dos hogares, en lugar de uno (o peor, que no tienen ningún hogar).

A continuación se muestran algunos horarios comunes de custodia compartida. Tenga en cuenta que esta no es en absoluto una lista exhaustiva, y que al calcular su horario, debe ajustarse y ser flexible según las necesidades de su hijo.

Alternancia

Como nota general, al seguir un horario alternativo, la transición entre los padres puede ocurrir en cualquier momento de la semana. Trabaje con su copadre y sus hijos para encontrar un horario que funcione mejor para usted.

Plan #1: Semanas alternas Plan 1

Esta es una de las formas más populares de dividir la custodia; es simple y fácil de recordar. Los niños pasan una semana en una casa y la siguiente en la otra. La transición de un padre a otro ocurre más comúnmente el viernes, como se representa, pero la semana puede comenzar y terminar cualquier día que funcione mejor para su familia.

Plan #2: Alternar cada 2 semanas Plan 2

Si el transporte entre los dos hogares es un gran problema, un horario de alternancia quincenal es también una opción. Mientras que los niños más pequeños necesitan un contacto más constante con sus padres, los más mayores, como los que están en el instituto, son más propensos a disfrutar y adaptarse a este horario.

Plan 3: Alternar las semanas con una visita a mitad de semana Plan 3

Si cree que una semana es demasiado tiempo sin ver a su hijo, puede organizar una visita en algún momento de la semana. Esto podría ser tan sencillo como cenar juntos el miércoles por la noche antes de que vuelvan a su casa durante esa semana.

Plan #4: Alternar las semanas con una pijamada entre semana Plan 4

Esta es una opción secundaria a la visita entre semana. Puedes convertir la cena en una pernocta, enviar a tu hijo al colegio y que el padre de esa semana proceda a recogerlo. A diferencia de la opción de «visita» del Plan #3, este método permite que el niño pase toda la noche con el otro progenitor.

Plan #5: Alternar cada X días

Aunque alternar semanas suele ser lo más habitual, puedes hacer que la duración en cada casa sea tan corta o tan larga como quieras. Desde alternar cada 2 días, hasta cada 10, mantén en mente el reparto 50-50, ya que el tiempo que le toca a uno de los padres, le toca también al otro. Si tu hijo es mayor, intenta pedirle su opinión sobre lo que preferiría.

Rotaciones

Plan #6: Rotación 2-2-3 Plan 6

Con este horario, la semana se reparte entre los dos padres. Los niños pasan dos días con el progenitor A, dos días con el progenitor B, y luego 3 días del fin de semana con el progenitor A. El horario de la semana siguiente comienza entonces con el progenitor B, de modo que los niños pasan el fin de semana con el otro progenitor. El beneficio obvio es que ambos padres tienen la misma cantidad de tiempo durante el fin de semana, pero moverse cada dos días entre las casas podría resultar estresante para el niño, sobre todo si los dos hogares no están muy cerca el uno del otro.

Plan #7: Rotación 3-3-4-4 Plan 7

El niño pasa tres días con el padre A, luego tres días con el padre B, seguido de cuatro días con el padre A, luego cuatro días con el padre B. Esencialmente, este horario crea un hogar establecido para los niños de domingo a martes con el progenitor A, y de miércoles a viernes con el progenitor B. Para mantener la igualdad de tiempo entre los dos progenitores, el tiempo que se pasa con el progenitor se alterna los sábados. Este horario puede ayudar a mantener las cosas menos perturbadas, ya que hay días establecidos de las semanas que el niño está en cada casa, y la duración de la estancia en cada casa es ligeramente más larga que la rotación 2-2-3. Además, pueden ver a ambos padres más a menudo que con los horarios de semanas alternas.

Plan #8: Rotación 2-2-5-5 Plan 8

Esta rotación es similar a la rotación 3-3-4-4 del Plan #7, excepto que el hogar establecido para el padre A es de domingo a lunes, mientras que el hogar establecido para el padre B es de martes a miércoles. Los jueves, viernes y sábados se alternan entre los padres A y B. Si el hecho de que el padre A tenga todos los domingos es un problema, también podría comenzar la rotación el lunes para que sean los viernes, sábados y domingos los que se alternen entre los dos padres.

Plan #9: Rotación 3-4-4-3 Plan 9

Este horario es una ligera combinación del Plan #7 y el Plan #8 anteriores. El niño pasa tres días con el padre A, luego cuatro días con el padre B, seguidos de otros cuatro días con el padre A, y luego tres días con el padre B, y el patrón vuelve a empezar. El resultado es que hay un hogar establecido dos días de la semana para cada padre, y luego se puede alternar la mitad de la semana.

Como recordatorio, no importa el horario que elija, asegúrese de que está haciendo lo mejor para su familia, especialmente para sus hijos. A medida que crecen, intente darles voz en cuanto a qué horario prefieren más. También puede ser útil contar con una documentación formal del horario, para lo cual pueden ser útiles recursos como WeParent. Permite a la familia tener un calendario sincronizado para que todos estén en la misma página en cuanto a la casa en la que está el niño. Además, puede ser bueno tener un plan separado para las vacaciones. Echa un vistazo a nuestra publicación en el blog sobre cómo gestionar las vacaciones.

La aplicación móvil WeParent se adapta fácilmente a todos estos tipos de horarios de coparentalidad 50-50, y también es compatible con los horarios personalizados que siguen el tiempo compartido 50-50.

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