Administración de medicamentos 1: entender las vías de administración

Antes de administrar un medicamento, es importante entender los beneficios y las limitaciones de las vías de administración. Este artículo, el primero de una serie de dos partes sobre la administración de medicamentos, ofrece una guía rápida. Este artículo se publicó originalmente en línea; se actualizó el 18/05/2020

Resumen

La administración de medicamentos es una responsabilidad fundamental de las enfermeras registradas en los centros de atención sanitaria y cada vez más la realizan los asociados de enfermería. Antes de administrar cualquier medicamento, la persona que lo haga debe estar familiarizada con las ventajas y limitaciones de la vía prescrita y conocer las indicaciones, contraindicaciones y efectos secundarios del medicamento que pretende administrar. Este artículo, el primero de una serie de dos partes, ofrece una actualización sobre las vías de administración. En la segunda parte se expondrá el procedimiento de administración de medicamentos a los pacientes.

Cita: Shepherd M, Shepherd E (2020) Administración de medicamentos 1: entender las vías de administración. Nursing Times ; 116: 6, 42-44.

Autores: Martin Shepherd es director clínico de farmacia y terapia, Chesterfield Royal Hospital NHS Foundation Trust. Actualizado en 2020 por Eileen Shepherd, editora clínica de Nursing Times.

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Introducción

La administración de medicamentos es una responsabilidad fundamental de las enfermeras registradas en los entornos sanitarios; cada vez más, la tarea también la llevan a cabo los asociados de enfermería. Para garantizar la seguridad del paciente, es esencial que se aplique el procedimiento correcto para que se administre el medicamento correcto en la cantidad prescrita y por la vía más adecuada. Antes de administrar cualquier medicamento, la persona que lo lleve a cabo debe estar familiarizada con las ventajas y limitaciones de la vía prescrita, y conocer las indicaciones, contraindicaciones y efectos secundarios del medicamento que pretende administrar.

Uso y seguridad de los medicamentos

Un medicamento se define como cualquier sustancia química que puede afectar a los procesos de los seres vivos (Burchum y Rosenthal, 2016); este artículo se centra en los que se administran con efecto terapéutico. Para que sea apto para su administración a un paciente, un fármaco tiene que ser formulado en un preparado que permita su toma o administración -como un comprimido o una inyección-. Una vez formulado, el fármaco se convierte en un medicamento; sin embargo, los dos términos tienden a utilizarse indistintamente. Lo ideal es que cualquier medicamento sea eficaz, seguro y selectivo en su modo de acción.

La eficacia se refiere a la forma en que el cuerpo responde a un medicamento; si un medicamento no conduce a su resultado previsto, no hay ningún beneficio en prescribirlo (Burcham y Rosenthal, 2016). En el Reino Unido, el National Institute for Health and Care Excellence lleva a cabo evaluaciones tecnológicas sobre el uso de medicamentos y tratamientos nuevos y existentes en el NHS; estas utilizan la evidencia clínica sobre la eficacia y la evidencia económica sobre si el medicamento/tratamiento representa un valor para el dinero.

Todos los medicamentos se evalúan para valorar su seguridad, pero ningún medicamento está totalmente libre de riesgos. Las enfermeras deben:

  • Ser conscientes de cualquier problema potencial que los pacientes puedan experimentar al tomar cualquier medicamento;
  • Saber cómo y cuándo informar de ellos.
    • En el Reino Unido, el esquema de la Tarjeta Amarilla recoge y supervisa la información sobre sospechas de problemas de seguridad o incidentes relacionados con medicamentos y productos sanitarios. El programa está gestionado por la Autoridad Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios y depende de que los profesionales sanitarios y los pacientes notifiquen voluntariamente las sospechas de reacciones adversas a los medicamentos; su objetivo es proporcionar una alerta temprana de que la seguridad de un producto puede requerir más investigación.

      En principio, un medicamento debe ser selectivo en su acción sobre el organismo. Sin embargo, la mayoría de los medicamentos tienen efectos secundarios y es importante informar a los pacientes sobre estos riesgos; por ejemplo, los antihistamínicos pueden causar somnolencia. A veces, el paciente y el prescriptor deben decidir si el alivio de los síntomas está equilibrado con los posibles efectos secundarios; en algunas situaciones, los efectos secundarios pueden superar los beneficios del medicamento.

      Administración

      La forma de administrar los medicamentos influirá en cierta medida en su beneficio clínico y en que los pacientes experimenten algún efecto adverso. Por ejemplo, si la furosemida intravenosa (IV) se administra con demasiada rapidez, puede causar sordera, mientras que la penicilina V oral no se absorbe bien si se administra con alimentos) (www.bnf.org). Hay dos factores principales que determinan si un medicamento llegará al lugar de acción previsto en el organismo:

      • Su biodisponibilidad;
      • Cómo se administra (vía de administración).
        • Disponibilidad

          La biodisponibilidad es la proporción de un medicamento que llega a la circulación sistémica y que, por tanto, está disponible para su distribución al lugar de acción previsto (Burchum y Rosenthal, 2016). La vía de administración y la formulación -comprimido, cápsula, líquido- pueden influir en su biodisponibilidad.

          Se dice que los medicamentos administrados por inyección intravenosa tienen una biodisponibilidad del 100%. Algunos medicamentos que se absorben especialmente bien por la mucosa gastrointestinal, por ejemplo el antibiótico ciprofloxacino, pueden tener una biodisponibilidad cercana a la de una dosis intravenosa (bnf.org). Sin embargo, la mayoría de los medicamentos no tienen este nivel de disponibilidad por vía oral, por lo que la dosis administrada por vía oral suele ser mayor que la administrada por vía parenteral. Por ejemplo, el betabloqueante propranolol, cuando se administra por vía oral, se administra en dosis de 40 mg y superiores; la dosis intravenosa equivalente es de 1 mg.

          Vías de administración

          Existen varias vías de administración (Cuadro 1), cada una de las cuales tiene ventajas e inconvenientes. Estas vías deben entenderse en términos de sus implicaciones para la eficacia del tratamiento farmacológico y la experiencia del paciente.

          Cuadro 1. Vías de administración

          • Enteral: oral, a través de sondas de alimentación enteral
          • Tópica: a través de la piel, ojos, oídos, nariz, vagina, recto, pulmones (inhalada)
          • Parental: intravenosa, intramuscular, subcutánea

          Vía oral

          La vía oral es la más utilizada para la administración de medicamentos y es la más conveniente y rentable (Dougherty y Lister, 2015).

          Aunque las formas de dosis sólidas, como los comprimidos y las cápsulas, tienen un alto grado de estabilidad del fármaco y proporcionan una dosificación precisa, la vía oral es problemática debido a la naturaleza impredecible de la absorción gastrointestinal. Por ejemplo, los alimentos en el tracto gastrointestinal pueden alterar el pH del intestino, la motilidad gástrica y el tiempo de vaciado, así como la velocidad y el grado de absorción del fármaco.

          La tolerancia de los pacientes a las formas de dosis sólidas también varía, especialmente en los pacientes muy jóvenes y de edad avanzada, para quienes pueden ser preferibles los líquidos o las soluciones. Sin embargo, muchos medicamentos no son estables en solución; en estos casos, debe considerarse una alternativa. Los puntos clave se resumen en el Recuadro 2.

          Cuadro 2. Puntos clave sobre las vías de administración

          La vía oral es conveniente y rentable

          • Algunos pacientes, especialmente los niños y las personas mayores, pueden tener problemas para tragar comprimidos y cápsulas
          • Las formulaciones de liberación modificada pueden retrasar, prolongar o dirigir la administración del fármaco
          • Las enfermeras deben pedir consejo a un farmacéutico o al médico prescriptor antes de triturar cualquier comprimido
          • Los comprimidos de liberación modificada no deben triturarse ni romperse

          Preparaciones de liberación modificada

          Las formulaciones de liberación modificada pueden retrasar, prolongar o dirigir la administración del fármaco. El objetivo es mantener las concentraciones plasmáticas del fármaco durante períodos prolongados por encima de la concentración mínima efectiva. Su principal ventaja para los pacientes es que, por lo general, las dosis sólo deben tomarse una o dos veces al día.

          Mezcla de comprimidos

          El proceso de trituración de los comprimidos suele estar fuera de la licencia del producto y el personal de enfermería debe pedir consejo a un farmacéutico o al médico prescriptor si no está seguro de un comprimido y de si es adecuado para su trituración o si el proceso afectará a su eficacia (Dougherty y Lister, 2015).

          Los comprimidos de liberación modificada no deben triturarse ni romperse. Los daños en el mecanismo de control de la liberación pueden hacer que se libere toda la dosis del medicamento de una sola vez en lugar de hacerlo a lo largo de varias horas. La dosis completa del medicamento puede ser absorbida demasiado rápido, lo que puede provocar toxicidad, o no ser absorbida en absoluto, lo que puede conducir a un tratamiento subóptimo.

          Vías no orales

          Aunque la vía oral es la más utilizada para la administración de medicamentos, no siempre es apropiada. En estas situaciones se dispone de una serie de alternativas para tratar al paciente de forma eficaz.

          Administración sublingual

          La mucosa sublingual ofrece un rico suministro de vasos sanguíneos a través de los cuales se pueden absorber los medicamentos. No es una vía de administración habitual, pero ofrece una rápida absorción en la circulación sistémica. El medicamento más común que se administra por vía sublingual es el trinitrato de glicerilo para el tratamiento de la angina de pecho aguda.

          La industria farmacéutica ha formulado versiones de medicamentos en forma de oblea, que se disuelven rápidamente bajo la lengua. Están destinadas a grupos concretos de pacientes que tienen dificultades para tomar comprimidos, como el rizatriptán para personas con migrañas que a veces van acompañadas de náuseas, ya que esto puede impedirles tomar tratamientos orales. Las obleas también se utilizan para tratar afecciones en las que la adherencia es un problema; por ejemplo, la olanzapina puede administrarse por la vía sublingual cuando se utiliza para tratar la esquizofrenia (Montgomery et al, 2012).

          Administración rectal

          La vía rectal presenta considerables desventajas en cuanto a la aceptabilidad por parte de los pacientes debido a cuestiones culturales y a la posibilidad de que se produzcan molestias, fugas y una absorción impredecible; sin embargo, ofrece una serie de ventajas (Hua, 2019). La administración de fármacos puede localizarse en el intestino grueso; por ejemplo, el uso de esteroides rectales en forma de enemas o supositorios en el tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal. Los antieméticos pueden administrarse por vía rectal para tratar las náuseas y los vómitos, y el paracetamol puede administrarse para tratar a los pacientes con pirexia que no pueden tragar.

          Administración tópica

          La aplicación tópica de medicamentos tiene ventajas evidentes en el tratamiento de enfermedades localizadas. El medicamento está disponible casi directamente en el lugar de acción previsto, y dado que la circulación sistémica no llega en gran concentración, se reduce el riesgo de efectos secundarios sistémicos. Algunos ejemplos de medicamentos tópicos son:

          • Gotas oculares que contienen betabloqueantes para tratar el glaucoma;
          • Esteroides tópicos para tratar la dermatitis;
          • Broncodilatadores inhalados para tratar el asma;
          • Pesarios que contienen clotrimazol para tratar la candidiasis vaginal.
          • La administración tópica también se ha convertido en una forma popular de introducir medicamentos en la circulación sistémica a través de la piel. El desarrollo de parches transdérmicos que contienen medicamentos comenzó con la introducción de un producto a base de hioscina para el tratamiento de las náuseas a principios de la década de 1980 (Pastore et al, 2015). Desde entonces, el mercado de este tipo de productos ha crecido hasta incluir una amplia gama de áreas terapéuticas, como la de dejar de fumar (sustitución de la nicotina), el dolor crónico (fentanilo) o la enfermedad de Parkinson (rotigotina).

            La vía transdérmica no está exenta de problemas: por ejemplo, algunos preparados pueden causar reacciones cutáneas locales (Pastore et al, 2015), y la adhesividad de algunos parches puede ser una limitación. Sin embargo, para muchos pacientes es una buena alternativa a la toma de comprimidos.

            Administración a través de sondas de alimentación enteral

            Los medicamentos solo deben administrarse a través de sondas de alimentación enteral de calibre fino después de haber considerado otras vías. La mayoría de los medicamentos no están autorizados para su administración enteral y esta vía es compleja desde el punto de vista médico-legal.

            Entre el medicamento y la alimentación enteral pueden producirse interacciones que pueden comprometer la eficacia de un medicamento, y entre las interacciones clínicamente significativas se encuentran la fenitoína, la warfarina y la flucloxacilina.

            Los medicamentos que tienen que prepararse especialmente como líquidos para permitir la administración por sonda enteral suponen costes adicionales significativos, y deben considerarse alternativas antes de solicitarlas. Por lo tanto, un farmacéutico debe participar en cualquier decisión de administrar medicamentos por esta vía.

            BAPEN (Asociación Británica de Nutrición Parenteral y Enteral) ha elaborado información sobre la administración de medicamentos por sonda enteral, así como folletos informativos útiles para los pacientes.

            Vía parenteral

            La administración parenteral se refiere a cualquier medio no oral de administración de medicamentos, pero generalmente se interpreta como relacionada con la inyección directa en el cuerpo, evitando la piel y las membranas mucosas. The common parenteral routes are intramuscular (IM), subcutaneous (SC) and IV. Box 3 outlines the advantages and disadvantages of parenteral routes.

            Box 3. Parenteral administration

            Advantages

            • Can be used for medicines that are poorly absorbed, inactive or ineffective if given orally
            • The intravenous route provides immediate onset of action
            • The intramuscular and subcutaneous routes can be used to achieve slow or delayed onset of action
            • Patient adherence problems can be avoided

            Disadvantages

            • Staff need additional training and assessment
            • Can be costly
            • Can be painful
            • Aseptic technique is required
            • May require additional equipment, for example programmable infusion devices

            Parenteral administration requires an appropriate injection technique. Si se realiza de forma incorrecta -por ejemplo, utilizando una aguja o cánula de tamaño incorrecto- puede causar daños en los nervios, el músculo y la vasculatura y puede afectar negativamente a la absorción del fármaco. Por ejemplo, la administración inadvertida de insulina subcutánea en el músculo puede dar lugar a una rápida absorción y a episodios de hipoglucemia (Dougherty y Lister, 2015).

            Intramuscular y subcutánea

            En general, la inyección IM y SC de medicamentos establece un depósito o ‘depot’ que se liberará gradualmente en la circulación sistémica. La formulación del medicamento influirá en el periodo en el que se libera. Por ejemplo, la formulación de los agentes antipsicóticos, como el flupentixol en aceite, permite administrarlos una vez al mes o cada tres meses.

            Vía intravenosa

            La vía intravenosa conlleva el mayor riesgo de cualquier vía de administración de medicamentos. Al administrarse directamente en la circulación sistémica, ya sea por inyección directa o por infusión, el medicamento se distribuye instantáneamente a sus lugares de acción. Esta vía de administración puede ser compleja y en la actualidad forma parte integral del papel de la enfermera. Las personas que administran medicamentos por vía intravenosa deben tener la formación adecuada y ser consideradas competentes para llevar a cabo el procedimiento (Dougherty y Lister, 2015).

            Conclusión

            Es importante que cualquier enfermera que administre medicamentos o delegue este procedimiento en otro miembro de su equipo comprenda las diferentes vías de administración de medicamentos y sus limitaciones. Esto les permitirá evaluar la eficacia del medicamento que se está administrando e identificar cualquier problema potencial que el paciente pueda estar experimentando con el tratamiento. La parte 2 de esta serie describe el procedimiento para la administración segura de medicamentos.

            Recursos útiles

            • Formulario Nacional Británico
            • Royal Pharmaceutical Society, Royal College of Nursing (2019) Professional Guidance on the Administration of Medicines in Healthcare Settings. RPS/RCN

            Puntos clave

            • La biodisponibilidad es la proporción de un medicamento que llega a la circulación sistémica
            • La vía de administración elegida influirá en la eficacia de un medicamento y en la experiencia del paciente
            • Hay que tener cuidado antes de triturar los medicamentos, y siempre se debe pedir consejo al farmacéutico o al médico que lo prescribe
            • La trituración de los comprimidos de liberación modificada puede dar lugar a que se libere toda la dosis del medicamento de una sola vez en lugar de hacerlo gradualmente
            • La administración de medicamentos directamente a la circulación sistémica mediante inyección o infusión significa que el medicamento se distribuye rápidamente a sus lugares de acción

            Asociación Británica de Nutrición Parenteral y Enteral (2017) Administración de medicamentos a través de sondas de alimentación enteral. BAPEN.
            Burchum JR, Rosenthal LD (2016) Frmacología de Lehnes para enfermeras. Elsevier.
            Dougherty L, Lister S (2015) The Royal Marsden Hospital Manual of Clinical Nursing Procedures. Wiley-Blackwell.
            Hua S (2019) Consideraciones fisiológicas y farmacéuticas para las formulaciones de medicamentos rectales. Frontiers in Pharmacology; 10: 1196.
            Montgomery W et al (2012) Revisión de la olanzapina desintegrada por vía oral: eficacia, preferencia del paciente, adherencia y otras propiedades. Patient Preference and Adherence; 6: 109-125.
            National Institute for Health and Care Excellence (2020) NICE Technology Appraisal Guidance.
            Pastore MN et al (2015) Transdermal patches: history, development and pharmacology. British Journal of Pharmacology; 172: 9, 2179-2209.