Si está viendo manchas de aspecto polvoriento en el follaje de sus plantas, lo más probable es que tenga un caso de la muy común enfermedad fúngica del mildiú polvoroso. Aunque hay remedios químicos para el mildiú polvoroso, pocos jardineros caseros necesitan usarlos; estos controles suelen estar reservados para las operaciones agrícolas comerciales. Una mejor solución para los jardineros domésticos es simplemente seguir unas buenas prácticas culturales y, si se desea, aplicar un sencillo spray casero contra el oídio.
¿Qué es el oídio?
El oídio puede ser causado por muchas especies diferentes de hongos, aunque el más común en las cucurbitáceas es Podosphaera xanthii. El oídio es muy fácil de identificar porque sus síntomas son manchas pulverulentas de color blanco o gris en las hojas, los tallos, las flores e incluso los frutos de las plantas. Normalmente, primero se ve el residuo pulverulento en las hojas y los tallos inferiores, pero a medida que la enfermedad avanza, la capa pulverulenta puede cubrir toda la planta.
El oídio crece mejor en las condiciones que menos se esperan: en lugar de un entorno fresco y húmedo, el oídio prefiere las condiciones cálidas y secas donde hay una alta humedad combinada con temperaturas moderadas. Suele aparecer a finales de la primavera y principios del verano. Aunque un caso leve de oídio no suele ser mortal para la planta, una infección grave puede absorber los nutrientes de la planta, haciendo que las hojas se marchiten y amarilleen. La pérdida de hojas en plantas como los tomates y los pimientos, por ejemplo, puede provocar escaldado del fruto.
Las esporas del oídio se propagan por el viento y pueden sobrevivir al invierno en los restos de las plantas o en los montones de abono. Asegúrese de eliminar las plantas y hojas infectadas para ayudar a prevenir futuros brotes.