Cómo quitar la tos: remedios caseros para la tos persistente
Las causas de la tos son múltiples, aunque la más común suele ser cuando tenemos un virus, que irrita la garganta, las vías respiratorias y los pulmones, y la tos se produce porque el cuerpo intenta liberar las sustancias nocivas. También hay variados tipos de tos, como la tos seca, que no presenta expectoración, la productiva, que es lo contrario, la asmática con algún tipo de dificultad respiratoria, o la crónica, que se da mucho en los fumadores.
En muchos casos, no es necesario un tratamiento médico o farmacológico, porque no se trata de toses víricas, y pueden ser causadas por una alergia puntual al polvo, a algunas plantas, o simplemente por la sequedad en el ambiente, y no revisten mayor importancia.
Cómo quitar la tos con preparados naturales
- Los jarabes y preparados a base de miel son muy efectivos para aliviar la tos y la garganta irritada. Es un remedio tradicional, y se puede tomar sola, o mezclada con un poco de limón.
- Una infusión de té del tipo que más nos guste, junto con unos granos de pimienta y un poco de miel es un preparado perfecto para utilizarlo en los casos de tos productiva, porque facilitan el flujo de flemas, mientras que la miel alivia la tos. Hacemos un té normal y le añadimos dos cucharaditas de miel y unos granos de pimienta, tapamos y dejamos reposar durante unos 15 minutos, antes de tomarlo.
- El té a base de tomillo es muy efectivo para calmar la tos, y relaja la tráquea irritada por el efecto de toser. Además, disminuye posibles inflamaciones. Introducimos unas hojas de tomillo en una infusión de té, dejamos reposar tapado y tomamos después. Notaremos un alivio de la tos.
- La menta es muy efectiva, sobre todo para la tos seca. Además, nos ayuda a respirar mucho mejor y está muy indicado para la tos asmática. Basta con echar unas gotas o unos cristales de mentol en agua hirviendo, dejar reposar para no quemarnos, y cuando el agua esté algo menos caliente, practicar unas inhalaciones.
- Otro productos natural muy efectivo es el jengibre, ya que propiedades antihistamínicas y descongestionantes, por lo que nos podemos preparar un té dejando primero hervir el agua, a la que se le añaden unas rodajitas de jengibre. Después, colamos el resultado sobre una taza, y dejamos reposar durante unos 15 minutos.
- El regaliz, así como la menta son muy efectivos para suavizar la garganta. Los caramelos vienen muy bien, tanto de regaliz como de menta, y los palos de regaliz se pueden hervir durante 20 minutos, para después colar el agua y consumirla junto con unas gotas de limón y una cucharadita de miel.
Pautas que alivian la tos
- Hay un remedio muy tradicional y efectivo que es la cebolla para la tos. Consiste en cortar una cebolla en dos, y poner media cebolla en la habitación de la persona que está tosiendo. La habitación cogerá esa noche un olor bastante desagradable a cebolla, pero los resultados son sorprendentes, la persona dejará de toser durante la noche, y se sentirá mucho mejor por la mañana.
- Darse un baño caliente, todo lo caliente que podamos, es remedio casero para la tos que resulta muy efectivo, ya que el vapor que desprende el baño suaviza las vías respiratorias y puede aflojar la congestión nasal y las flemas de garganta y pulmones. Se pueden agregar al baño unas gotas de aceite de eucalipto para que resulte más efectivo.
- Beber mucha agua es siempre fundamental, porque ayuda a aliviar la tos y a sacar las mucosidades, a la vez que mantiene húmedas nuestras membranas.
- En muchos casos, la tos seca se debe a los ambientes secos. Sería preciso entonces tener un ambiente más húmedo en casa. Se puede comprar un pequeño humidificador de farmacia como solución, o bien comprar humidificadores para los radiadores.
¿Cómo podemos prevenir la tos?
La tos puede, en algunos casos, prevenirse, cuando no se trata de una tos vírica, en cuyo caso habría que acudir al médico, y tratarse con medicamentos. Una medida de prevención muy efectiva consiste, en cualquier caso, las vacunas contra la gripe, para evitar contraerla a lo largo del invierno y evitar las infecciones.
La limpieza de nuestro entorno es fundamental, porque muchas toses se producen por la acumulación de polvo, sobre todo la tos seca, también en personas alérgicas. Es esencial lavarse las manos con frecuencia, sobre todo después de toser. Si somos alérgicos, conviene saber cuáles son los alérgenos comunes como polen, ácaros del polvo, ciertos árboles y sobre todo en determinadas épocas del año, el moho o determinados insectos.
Si la tos persiste, entonces debemos buscar tratamiento médico, ya que puede deberse a una infección, o a que tenemos un virus. Lo mejor para quitar la tos sería entonces un tratamiento a base de fármacos, incluyendo antibióticos, si fuera necesario. Debemos consultar al médico si la tos va acompañada de otros síntomas como fiebre, deshidratación, malestar general o mareos, tos productiva con flema verde, deshidratación, o sensación de debilidad generalizada.
Ya os indicamos algunos remedios para bajar la fiebre rápidamente, pero si a pesar de todo no baja hay que pedir cita a nuestro médico de cabecera y no poner en riesgo nuestra salud.