Consejos sobre implantes metálicos – Prótesis de cadera
¿Cuál es el problema de los implantes de metal sobre metal?
Desgaste
Todos los implantes de cadera se desgastan con el tiempo, ya que la bola y la copa se deslizan una contra otra durante los movimientos, incluyendo caminar y correr.
Aunque muchas personas viven el resto de su vida sin necesitar un implante de reemplazo, algunas personas pueden necesitar eventualmente una cirugía para retirar o reemplazar sus componentes.
La evidencia sugiere que ciertos tipos de implantes de metal sobre metal se desgastan a un ritmo más rápido que otros tipos.
Como la fricción actúa sobre sus superficies, puede causar que pequeñas partículas de metal se rompan y entren en el espacio alrededor del implante.
Se cree que las personas reaccionan de forma diferente a la presencia de estas partículas metálicas, pero pueden desencadenar inflamación y molestias en la zona que rodea el implante en algunas personas.
Si no se detecta a tiempo, esto puede causar daños y deterioro en el hueso y el tejido que rodea el implante y la articulación con el tiempo. Esto, a su vez, puede hacer que el implante se afloje y provoque síntomas dolorosos, lo que significa que se requiere una nueva cirugía.
La guía de la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA) está diseñada para detectar y tratar cualquier complicación de este tipo.
Iones metálicos en la sangre
Algunas noticias se han centrado en la recomendación de la MHRA de comprobar la presencia de iones metálicos en la sangre.
Los iones son moléculas cargadas eléctricamente. Los niveles de iones en la sangre, en particular de cobalto y cromo utilizados en la superficie de los implantes, pueden, por tanto, indicar el grado de desgaste de la cadera artificial.
Estos iones en la sangre no suponen un envenenamiento de la sangre y no conducen a la sepsis, que es un tipo de enfermedad totalmente diferente. Hablar de esto en algunas noticias es muy engañoso y completamente erróneo.
No ha habido ninguna relación definitiva entre los iones de los implantes de metal sobre metal y la enfermedad, aunque ha habido un pequeño número de casos en los que los altos niveles de iones metálicos en la sangre se han asociado con síntomas o enfermedades en otras partes del cuerpo, incluyendo efectos en el corazón, el sistema nervioso y la glándula tiroides.