Cuál es la diferencia entre antisemitismo y antisionismo?
El Partido Laborista del Reino Unido ha estado en el centro de una disputa sobre el antisemitismo, incluyendo su relación con el antisionismo. ¿Qué significan realmente estos términos?
- El antisemitismo es «la hostilidad y el prejuicio dirigidos contra el pueblo judío» (OED).
- El sionismo se refiere al movimiento para crear un estado judío en Oriente Medio, que corresponde aproximadamente a la tierra histórica de Israel, y por lo tanto el apoyo al estado moderno de Israel. El antisionismo se opone a ello.
- Pero algunos dicen que «sionista» puede utilizarse como un ataque codificado contra los judíos, mientras que otros dicen que el gobierno israelí y sus partidarios confunden deliberadamente el antisionismo con el antisemitismo para evitar las críticas.
El ex alcalde de Londres, Ken Livingstone, fue suspendido de los laboristas tras una serie de comentarios sobre Israel, incluyendo la sugerencia de que Hitler apoyaba el sionismo antes del Holocausto.
Se suma a la suspensión de la diputada de Bradford West, Naz Shah, después de que saliera a la luz que en una ocasión sugirió, entre otras cosas, que Israel debería trasladarse a Estados Unidos. La nueva presidenta de la Unión Nacional de Estudiantes, Malia Bouattia, también ha sido muy criticada por los comentarios que hizo sobre los sionistas.
Muchos en la comunidad judía dicen que el uso de «sionista» como un término de abuso refleja una creciente ola de fanatismo y racismo dirigido a los judíos.
El parlamentario laborista Lord Levy declaró al programa Newsnight de la BBC: «Puede haber críticas al Estado de Israel, pero el antisemitismo -el uso de la palabra ‘sionista’ como otra forma de antisemitismo- francamente no puede seguir siendo tolerado.»
Otros -incluido Livingstone- sostienen que el antisionismo no es lo mismo que el antisemitismo, y que es un error mezclar los prejuicios antijudíos con el legítimo desacuerdo con las acciones del Estado israelí.
Sin embargo, los críticos de los antisionistas señalan que a veces las críticas especialmente duras a Israel van más allá del desacuerdo con las políticas, sino que niegan el derecho del Estado judío a existir.
En declaraciones a The Daily Politics, el ex alcalde de Londres dijo: «No hay que confundir el antisemitismo con la crítica a la política del gobierno israelí y el trato a los palestinos»
Es un debate en torno al cual las emociones se disparan. También es obviamente cierto que ser sionista y ser judío no es lo mismo.
Hay críticos sionistas de las políticas del gobierno israelí, como la ocupación de Cisjordania, el trazado de la barrera de separación (que Israel está construyendo en Cisjordania y sus alrededores y que dice que es por seguridad contra los atacantes palestinos, aunque los partidarios palestinos lo ven como un dispositivo para acaparar tierras) y la construcción de asentamientos.
También hubo oposición judía al movimiento sionista, que pretendía establecer una patria judía, mucho antes de que se declarara el Estado de Israel en 1948. Hoy en día, grupos ultraortodoxos marginales como Neturei Karta se oponen al Estado de Israel porque creen que el verdadero Estado judío sólo se establecerá con la llegada del Mesías.
Así mismo, algunos señalan que el sionismo es un proyecto político apoyado por muchos no judíos, incluidos los gobiernos occidentales y muchos cristianos evangélicos estadounidenses.
Pero se ha argumentado ampliamente que el término «sionista» se ha convertido, en algunos círculos, en una palabra clave para «judío» y que la intolerancia contra el pueblo judío se ha expresado utilizando el lenguaje del antisionismo.
¿Qué es el sionismo?
- Movimiento político que surgió en la Europa del siglo XIX con el objetivo de contrarrestar el antisemitismo, y establecer una patria judía
- En la Biblia hebrea la palabra «Sión» hace referencia a Jerusalén, de ahí la identificación del movimiento con la ciudad y la tierra que la rodea
- Declaración Balfour de 1917 dio apoyo británico al establecimiento de un hogar nacional judío en Palestina
- Chaim Weizmann, presidente de la Organización Sionista, fue elegido primer presidente de Israel en 1949
Khadim Hussain, ex alcalde de Bradford, fue suspendido del Partido Laborista después de que compartiera un post en Facebook en el que se refería a «los seis millones de sionistas que fueron asesinados por Hitler». Alex Chalmers, ex copresidente del Club Laborista de la Universidad de Oxford, dijo que algunos miembros utilizaban regularmente la palabra «zio», a pesar de que se considera un insulto étnico.
Bouattia fue atacada después de que saliera a la luz que en 2011 coescribió un blog para un grupo de campaña de Amigos de Palestina en el que decía que «la Universidad de Birmingham es una especie de puesto de avanzada sionista en la educación superior británica». También ha atacado a los «medios de comunicación dirigidos por los sionistas», lo que, según los críticos, refleja los mitos antisemitas sobre las conspiraciones judías para controlar los medios de comunicación.
Por otro lado, se afirma regularmente que las acusaciones de antisemitismo se despliegan para silenciar las críticas al gobierno israelí o para promover otros fines políticos.
Pia Feig, de Manchester Jews for Justice for Palestinians, declaró al programa Jeremy Vine de la BBC Radio 2 que «el antisemitismo se ha utilizado para acallar y suprimir mi preocupación y la de otras personas por los palestinos».
En un comunicado tras la suspensión de Livingstone, el Grupo de Socialistas Judíos dijo que las acusaciones de antisemitismo estaban siendo «armadas» para atacar el liderazgo de Jeremy Corbyn.
Por otro lado, los partidarios de Israel se preguntan por qué es el estado judío el que es tan ampliamente señalado para las críticas y no Irán, Rusia, China o cualquier otro estado atacado por su historial de derechos humanos.
La baronesa Julia Neuberger dijo en el programa de Jeremy Vine de la BBC que el antisionismo implica que «los judíos no tienen derecho a la autodeterminación, a diferencia de otros pueblos». Mark Wallace, escribiendo para Conservative Home, dijo que en la práctica significaría permitir que Israel sea aniquilado por sus enemigos o «negar a millones de judíos israelíes su hogar y deportarlos».
Algunos antisionistas dicen que el propio sionismo es una ideología racista, debido a cómo, en su opinión, el pueblo palestino ha sido tratado por el Estado israelí. La Campaña de Solidaridad con Palestina afirma que se opone a todo tipo de racismo, incluidos los prejuicios antisemitas y la «naturaleza sionista y de apartheid del Estado israelí», aunque la propia PSC ha sido acusada de racismo por su postura antisionista.
Bouattia dijo que rechazaba las acusaciones de prejuicio, añadiendo que «el hecho de que yo esté en desacuerdo con la política sionista no significa que esté en desacuerdo con el hecho de ser judío» y que «la política sionista es sostenida por personas de diferentes creencias, al igual que la política antisionista».
Las acusaciones de antisemitismo siguen persiguiendo a los laboristas. Vicki Kirby fue obligada a renunciar como candidata parlamentaria tras tuitear que Hitler era un «Dios sionista». Fue readmitida y luego suspendida de nuevo. Gerry Downing, que fue expulsado del partido, describió a los «políticos sionistas dentro de las clases dirigentes de Estados Unidos y Europa».
Livingstone fue acusado de «reescribir la historia» por sus comentarios sobre el apoyo de Hitler al sionismo por el diputado laborista John Mann, presidente del Grupo Parlamentario de Todos los Partidos contra el Antisemitismo.
Pocos negarían que hay antisemitas que se llaman a sí mismos antisionistas, o que es posible criticar a Israel sin ser un racista o un fanático. Pero parece difícil llegar a un acuerdo sobre cómo se relacionan exactamente ambas cosas.
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