La ansiedad y el temblor

La ansiedad y el temblor

El temblor es uno de los síntomas más comunes de la ansiedad, y una de las formas más claras de saber que estás nervioso. Hay oradores seguros de sí mismos -hombres y mujeres acostumbrados a estar frente a un público- a los que les tiemblan las manos violentamente durante sus presentaciones porque es una parte de la ansiedad y el nerviosismo que es muy difícil de controlar.

También es un problema común en los trastornos de ansiedad. Este artículo explorará las causas y soluciones al temblor ansioso.

Temblor temporal y problemático

De vez en cuando, te vas a encontrar nervioso: puedes estar en una primera cita, puedes tener un examen importante o puedes dar un discurso o una presentación. Es natural sentirse nervioso en esos momentos y, por desgracia, es poco lo que puedes hacer para controlar el temblor.

Pero hay muchas personas que tiemblan todo el tiempo, en momentos aleatorios del día, incluso cuando no hay nada que lo provoque. Hay personas que tiemblan en el trabajo, en casa y cada vez que tienen un ataque de pánico. Esto puede ser un signo de un trastorno de ansiedad.

Por qué el cuerpo tiembla durante la ansiedad

Los temblores son el resultado de la activación del sistema de lucha o huida, una herramienta evolutiva que está destinada a mantenerte a salvo en momentos de peligro. Durante la ansiedad intensa, su cuerpo se inunda con una hormona llamada epinefrina (adrenalina). Esa hormona activa tus nervios y músculos, dándoles la energía que necesitan para luchar, huir o reaccionar.

Cuando tu temblor es un problema

Sin ansiedad, no tendrías ni idea de lo que deberías temer, y si te enfrentaras a un peligro te costaría mucho más huir o protegerte.

Es por eso que durante eventos habituales, como hacer la selectividad, meterte en una pelea o pedirle a alguien que se case contigo, te pones naturalmente nervioso. Te enfrentas a una situación que te da miedo, es emocionante o es peligrosa para ti, y por eso es natural que te sientas ansioso. Lo necesitas para tomar buenas decisiones y mantenerte a salvo.

El problema no es la ansiedad en sí, y no es el temblor. Por mucho que sea agradable no temblar, es una respuesta natural y saludable. El problema es cuando no puedes controlar tu ansiedad incluso cuando no te enfrentas a ese tipo de situaciones. Cuando eso ocurre, puede tener un trastorno de ansiedad.

Efectos de los trastornos de ansiedad

Un trastorno de ansiedad se produce cuando se experimenta ansiedad sin ninguno de estos tipos de situaciones desencadenantes. Quienes padecen un trastorno de ansiedad pueden encontrarse temblando sin tener que enfrentarse a una situación peligrosa. Por ejemplo:

  • Trastorno de Ansiedad Generalizada Los temblores pueden ocurrir todo el tiempo o debido a pensamientos nerviosos.
  • Trastorno de Pánico Los temblores pueden ocurrir antes, durante y después de un ataque de pánico.
  • Trastorno de Estrés Postraumático Los temblores pueden ocurrir en respuesta a escuchar ruidos fuertes.

Otros factores que afectan a los temblores

Es posible que esté temblando por otras razones. La diabetes y la enfermedad de Parkinson están relacionadas con los temblores y las sacudidas. La deshidratación y la hipoglucemia son dos causas muy comunes de los temblores.

Cómo dejar de temblar

Simplemente tienes que esperar a que se te pase e intentar controlar tu ansiedad en el proceso. Mientras tanto, hay algunas cosas sencillas que puede probar:

  • Trotar o correr Utilizar sus músculos trotando o corriendo puede ayudar a liberar parte de su estrés y energía acumulada.
  • Respiraciones profundas Respirar despacio también puede ser útil para agitarse. Las respiraciones profundas, completas y lentas pueden calmar la ansiedad y pueden reducir la hiperventilación.
  • Algunas personas se han entrenado para temblar menos. Beber agua y comer más sano también puede ayudar. Algunas personas tiemblan peor cuando su cuerpo necesita más nutrientes o hidratación.

    Estrategias para reducir la ansiedad

    Si te encuentras temblando a menudo, necesitas buscar ayuda. Hay muchas vías que puedes elegir para controlar tu ansiedad.

    • Modificación del estilo de vida Comer más sano, hacer ejercicio, pasar tiempo con gente más positiva y encontrar más tiempo para ti mismo para relajarte es muy importante para controlar la ansiedad. Incluso si decide seguir otros tratamientos, un cambio completo en el estilo de vida puede hacer que lidiar con la ansiedad sea más fácil.
    • Terapia cognitivo-conductual (TCC) La TCC es la terapia más eficaz disponible actualmente para controlar los trastornos de ansiedad. Trata específicamente de cómo recuperarse de algunos de los procesos de pensamiento defectuosos que conducen a la ansiedad y es una gran herramienta para controlar el día a día.
    • Medicamentos Lo ideal es evitar los medicamentos ya que no tratan la ansiedad directamente. Pero son útiles para el control a corto plazo si la terapia y los cambios en el estilo de vida no son suficientes. También hay medicamentos naturales como el kava que pueden ser beneficiosos.

    Resumen:

    Los temblores son un síntoma de ansiedad y nerviosismo que se supone que señalan el peligro, y también son el resultado de la adrenalina que prepara tus músculos para luchar o huir. Es difícil dejar de temblar en el momento, pero hay técnicas de reducción de la ansiedad que pueden aliviar la mente y el cuerpo para que el temblor sea menos perturbador.

    La mejor manera de encontrar un tratamiento eficaz, sin embargo, es basarse en sus síntomas de ansiedad. Tus síntomas son los que definen tu ansiedad y, en última instancia, te dan las herramientas que necesitas para detenerla.