Lo que el auge del maquillaje para hombres significa para la masculinidad

«La belleza es cuestión de estilo. No conoce género»

Así lo proclama la nota de prensa que anuncia la primera línea de maquillaje para hombres de Chanel, Boy de Chanel. Llamada así por el amante de Coco Chanel, Boy Capel, la línea se lanzó en septiembre en Corea del Sur y llega a las tiendas de Estados Unidos en 2019.

La línea puede estar capitalizando una tendencia creciente. Algunos creen que el maquillaje para hombres se está volviendo cada vez más corriente, impulsado por los cambios de imagen en Queer Eye y una actitud expansiva hacia la masculinidad entre los jóvenes estadounidenses. El maquillaje y el cuidado de la piel para los hombres ahora no sólo se aceptan, sino que se ven como herramientas que los hombres deben utilizar «para practicar el autocuidado, pero también sólo para verse y sentirse mejor», dijo a Vox David Yi, fundador del sitio de belleza para hombres Very Good Light.

El maquillaje para hombres está lejos de ser un fenómeno nuevo. Los cortesanos masculinos de la Europa del siglo XVIII lo llevaban y, como señala Yi, los cosméticos ya son populares entre los hombres de Corea del Sur. Pero en EE.UU., los hombres han evitado tradicionalmente el maquillaje.

Si eso cambia, el maquillaje podría ayudar a los hombres a romper las normas de género restrictivas y a expresarse más plenamente. Pero también podría obligarles a enfrentarse a algo que, hasta ahora, ha sido mayoritariamente competencia de las mujeres: la presión de cumplir con unos estándares de belleza poco realistas gastando cada vez más de sus ingresos en barras de labios, polvos y cremas.

Históricamente, los hombres estadounidenses no han llevado maquillaje. Eso podría estar cambiando.

Los hombres han decorado sus rostros durante milenios. Los antiguos egipcios, al igual que las mujeres, llevaban kohl alrededor de los ojos, lo que, según las investigaciones, podría tener propiedades antibacterianas además de decorativas. En la Inglaterra y la Francia del siglo XVIII, hombres y mujeres se maquillaban la cara de blanco y rojo a base de plomo.

Pero el maquillaje no se convirtió en algo habitual para nadie en Estados Unidos hasta la década de 1920, según explica Lisa Wade, profesora de sociología del Occidental College y autora del libro de texto Gender: Ideas, Interacciones, Instituciones, dijo a Vox. A medida que un mayor número de estadounidenses se trasladaba a las ciudades, el cortejo se trasladó del hogar a establecimientos que costaban dinero, como los cabarets y los nickelodeons. Los hombres eran los que tenían dinero, y las mujeres «tuvieron que empezar a apelar a los hombres para que las eligieran» para las citas. Así que las mujeres empezaron a maquillarse.

«Las empresas que venden maquillaje podrían ganar el doble de dinero si pudieran vender a los hombres», dijo Wade. Pero eso no ocurrió: «De alguna manera, la ideología de género venció al capitalismo en esta competición»

«El género consiste en mantener la idea de que los hombres y las mujeres son diferentes», explicó Wade. «Cualquier cosa que hagamos que socave la distinción es una amenaza real para la superioridad masculina».

No está convencida de que el maquillaje masculino se convierta en algo realmente habitual, y señala que celebridades como Boy George se maquillaban en los años 80. «Siempre ha habido hombres que han pinchado y empujado estos límites», dijo.

Pero otros creen que cuando se trata de pintarnos la cara, los límites entre hombres y mujeres se están reduciendo. En todo el mundo, las ventas de productos de belleza y moda para hombres han crecido más rápido que las de las mujeres desde 2010, según la CNN. Una encuesta de 2016 reveló que casi la mitad de los hombres británicos usaban productos para el cuidado de la piel a diario, y el 59% dijo que la apariencia era muy importante.

Mientras tanto, marcas como Cover Girl y Maybelline han presentado a los hombres en sus anuncios. Y la popularidad de Queer Eye de Netflix ha ayudado a desmitificar los cosméticos para los hombres. Yi señaló un episodio que se emitió a principios de este año, en el que el experto en aseo personal del programa (y estrella revelación) Jonathan Van Ness mostraba al concursante Tom Jackson cómo utilizar un corrector de color para atenuar el enrojecimiento de su rostro.

«Incluso muchas mujeres que se dedican a la belleza no utilizan el corrector de color», dijo Yi. «Ese fue un momento tan importante en el ámbito de la belleza para los chicos».

En los últimos años ha aumentado la presión «para que los hombres mantengan la juventud, por lo que parece que buscan cada vez más tratamientos estéticos», dijo el doctor Jules Lipoff, profesor asistente de dermatología clínica en la Universidad de Pensilvania. Ha observado un mayor interés entre los hombres por el cuidado de la piel, aunque no por el maquillaje en concreto.

Pero «es un asunto de huevo y gallina», dijo. «¿Es que los hombres empezaron a interesarse más por ello, y luego empezaron a comercializarlo e impulsarlo más, o empezaron a comercializarlo e impulsarlo más, y luego hubo más interés?»

Yi cree que el ascenso de la Generación Z -personas más jóvenes que los millennials, nacidas desde mediados de los 90 hasta principios de los 2000- está marcando el comienzo de una actitud más aceptante hacia el maquillaje masculino en la sociedad estadounidense.

«La Generación Z está ahora a la vanguardia de la cultura», dice, citando a Jaden Smith y Lil Uzi Vert, celebridades masculinas que a veces llevan faldas o blusas. «Son mucho más progresistas y abiertos, sexualmente fluidos y de género que los millennials».»

«Ahora se están replanteando lo que significa la masculinidad, lo que significa ser un chico, y pintarse la cara o usar productos para el cuidado de la piel no te hace menos hombre», afirma.

Aunque varias marcas han adoptado la fluidez de género en su marketing -Milk, por ejemplo, se asoció con Very Good Light en un vídeo en el que se mostraba a personas de diversas identidades y presentaciones de género usando maquillaje de Milk-, son menos las que venden productos dirigidos específicamente a los hombres.

Además de la nueva línea Boy de Chanel, Tom Ford fabrica corrector, bronceador y gel para cejas para hombres. La empresa Fluide se lanzó a principios de este año para ofrecer «maquillaje para todas las expresiones de género, identidades de género y tonos de piel»

«Yo no diría que hay ninguna marca fuerte específica para hombres», dijo Yi. «En la cultura estadounidense necesitamos desarrollar maquillaje para el hombre de a pie».

El maquillaje para hombres podría fomentar la autoexpresión -o la duda-

Aunque la investigación es limitada, la piel de los hombres parece diferir de la de las mujeres en ciertos aspectos, dijo Lipoff. Un estudio de 1975, el más actualizado sobre el tema, descubrió que la piel de los hombres tiende a ser más gruesa que la de las mujeres, pero que pierde más colágeno con el tiempo. Los hombres también tienden a tener diferentes quejas sobre su piel que las mujeres, dijo Lipoff, a menudo se centran alrededor de la línea del cabello o los ojos.

Pero los hombres y las mujeres no tienen realmente diferentes necesidades de productos desde una perspectiva dermatológica, dijo Lipoff. La mayoría de las personas pueden beneficiarse de la protección solar y de una crema hidratante si tienen la piel seca. Más allá de eso, no hay muchos datos que apoyen la necesidad de productos adicionales, aunque algunos pueden reducir la apariencia de las líneas de expresión.

Por supuesto, las feministas han debatido durante mucho tiempo la política de maquillaje para las mujeres, sopesando las oportunidades de experimentación y autoexpresión frente a la presión para ajustarse a un determinado estándar de belleza. Al menos desde la segunda ola, las críticas feministas han apuntado a la expectativa de que las mujeres deben modificar su apariencia para ser atractivas para los hombres y aceptables en la sociedad. Cuando la cantante y compositora Alicia Keys comenzó a aparecer en público sin maquillaje en 2016, fue, en parte, un esfuerzo por oponerse a esas expectativas.

«Por la mañana, desde el minuto en que me despierto», escribió en la canción «Girl Can’t Be Herself», «¿Qué pasa si no quiero ponerme todo ese maquillaje? ¿Quién dice que debo ocultar lo que tengo? Tal vez toda esta Maybelline está cubriendo mi autoestima.»

Otras, por su parte, han visto en el maquillaje una forma de afirmar sus identidades en un mundo que las devalúa. La escritora y activista Janet Mock, por ejemplo, ha escrito sobre cómo un cambio de imagen por parte de una amiga le ayudó a sentirse identificada como joven trans.

Históricamente, pocos hombres han tenido que preocuparse por la política del maquillaje. Pero si el maquillaje de los hombres se convierte en la corriente principal, es posible que se enfrenten a algunas de las mismas presiones que sienten las mujeres – y, tal vez, obtengan algunas de las mismas oportunidades de expresión.

Aunque los hombres todavía se enfrentan a muchos menos juicios sobre su apariencia que las mujeres, dijo Lipoff, el aumento de la atención sobre la apariencia de los hombres podría tener un impacto en su salud mental. «No me sorprendería que, con el tiempo, empezáramos a ver más trastornos dismórficos corporales, más trastornos alimentarios y otras cosas que aumentan en los hombres», dijo. En el Reino Unido, el número de hombres hospitalizados por trastornos alimentarios aumentó un 70% entre 2010 y 2016, el mismo ritmo de incremento que entre las mujeres, como informa Sarah Marsh en The Guardian.

«Para mí, esto se convierte no en una cuestión de género sino en una cuestión de capitalismo», dijo Wade. El capitalismo contemporáneo «se nutre de hacernos sentir que no somos lo suficientemente buenos», dijo. Si el maquillaje para hombres se generalizara, ¿significaría eso que «más personas se sentirían mejor consigo mismas porque podrían comprar los productos que les hacen parecer menos», se pregunta. «No creo que eso sea algo bueno»

Pero Yi argumenta que los hombres ya tienen muchas de las mismas inseguridades que las mujeres, «sólo que han sido condicionados a no hablar de ello»

Las mujeres «han sido capaces de identificar los problemas por los que pasan, y son capaces de encontrar maneras de superar esas cosas, mientras que los chicos, tienen todos estos problemas, pero han sido reprimidos», dijo.

Al hablar abiertamente sobre la belleza de los hombres junto con otros temas en Very Good Light, dijo, espera contrarrestar la «masculinidad tóxica» que lleva a los hombres a mantener sus problemas para sí mismos.

Yi, cuya rutina de belleza diaria típica incluye un régimen de cuidado de la piel coreano de 10 pasos, maquillaje de cejas y crema BB, lanzó el sitio en 2016 porque vio una necesidad insatisfecha de escritura de belleza para hombres, por hombres. «Tenía que haber otros tipos como yo en el mundo», pensó.

A estas alturas, está claro que hay mucho interés en el maquillaje para hombres: Very Good Light, por su parte, ha recibido cobertura en el New York Times y la CNN. Queda por ver si eso se traducirá en más cosméticos comercializados exclusivamente para hombres, y todas las oportunidades y presiones que ello podría conllevar.

Boy de Chanel estará disponible online en noviembre y en las tiendas estadounidenses en enero. Como ocurre con tantas cosas, mucho dependerá de si se vende.