Los 10 mejores consejos de supervivencia al aire libre

Estás en una situación salvaje que no es ideal – y quieres volver a la seguridad. Tienes las habilidades para protegerte de cualquier daño?

Aquí están los 10 mejores consejos de supervivencia que toda persona al aire libre debe conocer:

1. Domina tu actitud

Una situación de supervivencia no es el momento de entrar en pánico. Es más probable que sobrevivas a una situación difícil si te centras en mantener una actitud positiva y proactiva.

– Desarrolle un plan.
– Haga un inventario de los recursos que tiene.
– Identifique las tareas críticas necesarias para la supervivencia (agua, refugio, calor).
– Determinación: A menudo son las agallas las que separan a un superviviente de un no superviviente.
– Reconozca que los sentimientos no son hechos. Puede que te sientas desesperado, pero mantén tus pensamientos enfocados en las tareas que hay que llevar a cabo.

2. Haz un refugio aislado

Construir un refugio eficaz puede ayudarte a protegerte de la hipotermia – y de los elementos.

– Piensa en pequeño: Como tu calor corporal será tu principal fuente de calor, construye un refugio lo suficientemente grande como para que quepa tu cuerpo cuando estés tumbado.
– Construye el armazón: Para hacer un simple cobertizo, utiliza los recursos disponibles, como un árbol caído o apoya una rama fuerte de forma segura contra un árbol en pie.
– Añade los lados: Apila palos cerca de un lado. Utilice palos progresivamente más pequeños para rellenar los huecos.
– Añada aislamiento: Cubra los lados con corteza, hojas, agujas de pino, musgo, etc. – cuanto más grueso sea el material, más protegido estará. Añade un aislamiento similar al suelo, cuanto más grueso mejor.

3. Haz un refugio de sombra

En algunas situaciones, la protección contra el calor será lo más importante.

– Piensa en frío: Cavar sólo unos centímetros en el suelo puede descubrir un terreno más fresco.
– Construye un cobertizo: Utiliza palos o ramas para hacer un refugio sobre el suelo expuesto.
– Deja que el aire fluya: El propósito de este refugio es crear sombra. Utilice material disponible como corteza, hojas, un poncho, un saco de dormir de emergencia o una manta o cualquier tela disponible para cubrir un lado.
– Manténgase fresco: Túmbese en el suelo fresco bajo la sombra.

4. Encontrar agua limpia

Encontrar agua limpia y no contaminada es el santo grial de la supervivencia.

– Llueve: Recoge, almacena y bebe.
– Nieve: La energía que requiere tu cuerpo para absorber el agua de la nieve es alta. En lugar de comer la nieve, derrítela primero. Esto puede hacerse fácilmente sobre un fuego o con una estufa de campamento. Si no son opciones, usa el sol. Acelera el proceso picando el hielo y colgándolo en una bolsa de agua a la luz directa del sol. Si no hay sol, utiliza el calor de tu cuerpo.

5. Busca otras fuentes de agua

Hervir el agua durante un minuto es la mejor y más segura forma de eliminar cualquier patógeno.

– Cavar en busca de agua: Ciertas plantas indican que hay fuentes de agua cerca. Identifique las plantas, como la espadaña, el álamo o el sauce, y excave un agujero de filtración hasta alcanzar la humedad. Espere a que el agua se acumule en el agujero.
– Piense en la topografía: Los afloramientos rocosos, o las hendiduras son zonas probables de acumulación de agua. Recuerde que el agua que se encuentra en charcos o arroyos debe ser hervida.

6. Recoger agua de la vegetación

– Rocío: El rocío se acumula en las plantas y hierbas. Usando un paño o un trozo de ropa absorbe el rocío y luego exprímelo en un recipiente. Este puede ser un método muy eficaz para recoger una cantidad considerable de agua.
– Bolsa de humedad para plantas: Al igual que los humanos, las plantas sudan. Ate una bolsa de plástico alrededor de una rama frondosa de un árbol y, con el tiempo, el agua se acumulará.

7. Encender un fuego

Desea practicar métodos alternativos para encender el fuego antes de cuando sean necesarios.

– Fácil: Utiliza un mechero o cerillas impermeables. Mantenga las cerillas secas en un recipiente impermeable.
– Medio: Utilice un iniciador de fuego de magnesio. Afile limaduras de magnesio del palo, utilice el dorso de su cuchillo para crear una chispa y encender las limaduras.
– Avanzado: Se puede utilizar una batería para crear una chispa que encienda la yesca. Utilice la batería de su vehículo (desmontada del vehículo o de la embarcación) colocando cables o lana de acero para conectar los postes positivo y negativo. Esto inducirá una chispa o encenderá la lana. Con baterías más pequeñas, alinee dos baterías juntas, positivo con negativo. Utilice hilos de lana de acero para conectar los postes y crear una chispa y encender la lana. Una pila de 9 voltios funciona muy bien.

8. Haz un fuego

– Crea un haz de yesca: Reúne agujas de pino, hojas secas, plumón de algodoncillo o cardo y hierba seca para la yesca.
– Comience con algo pequeño: reúna palos pequeños y secos para la leña.
– Vaya a lo grande: Encuentre trozos de madera más grandes para obtener un combustible de larga duración.
– Únalo todo: Utilizando un trozo de madera más grande como bloque de viento, crea un nido con la yesca. Crea un tipi con la leña más pequeña para que pueda entrar el oxígeno. Enciende la yesca y colócala debajo del tipi. Respira de forma prolongada y constante para extender la llama. A medida que los trozos más pequeños prendan, añade progresivamente más combustible al fuego.

9. Conozca estos nudos

Todas las personas al aire libre deberían conocer una variedad de nudos. Cuando se trata de supervivencia, asegúrate de tener estos dos a mano.

– La bolina: Este nudo es extremadamente útil cuando necesitas atar algo a una cuerda a través de un bucle, porque cuanto más tiras, más se aprieta el nudo. Después de hacer un bucle, recuerde esto: el conejo sale del agujero, delante del árbol, va detrás del árbol y vuelve a bajar por su agujero original.
– Medio nudo doble: Se utiliza para atar un extremo de la cuerda alrededor de un objeto. Es un nudo útil para construir un refugio. Ate un medio nudo alrededor de su objeto, como un árbol o un poste, y siga con un segundo en la misma dirección para hacerlo doble. Tira fuerte para asegurarlo.

10. Haz un arpón

Con un simple arpón, puedes mejorar tus probabilidades de capturar un pez u otra caza menor.

– Selecciona un palo largo y recto.
– Divide el extremo del palo para crear una horquilla.
– Separa la horquilla con una cuña de madera o una piedra pequeña. Átalo en su sitio.
– Afila cada horquilla con un cuchillo o una piedra afilada.

Para hacer una lanza de tres puntas, añade un palo más pequeño después de colocar la cuña, afílalo y átalo en su sitio.

5 piezas de equipo que debes tener

Cuando se trata de equipo de supervivencia, las herramientas que pueden servir para más de un propósito son las mejores.

1. Encendedor: Bic (4 dólares); Coghlan’s Magnesium Starter (7,99 dólares) como respaldo; vela de té (1 dólar) – Un encendedor es barato y se mantiene seco para encender yesca. Tener un iniciador de fuego de respaldo es esencial.

2. Teléfono móvil: Aunque no siempre tengas señal, se ha convertido en la herramienta esencial de supervivencia moderna. Lleva también una batería extra o un cargador externo.

3. Bolsa de hidratación: MSR Dromedary Bag 10-L ($44.95) – Aunque la bolsa de hidratación MSR Dromedary viene en varios tamaños, ir con el 10-L le permite la flexibilidad de variar su volumen, dependiendo de su necesidad actual. Lo que diferencia a esta bolsa de las demás es su resistente cubierta exterior, que protege contra las abrasiones y las fugas.

4. Navaja plegable: El cuchillo plegable TecX Inceptra (24,99 dólares) es seguro y afilado. Este económico cuchillo plegable es ligero y se pliega convenientemente para mayor seguridad. Además, corta fácilmente la madera para hacer leña o sirve como punta de lanza.

5. Refugio de emergencia: El S.O.L. Thermal Bivvy de Adventure Medical Kits (29 dólares) es ligero y compacto. Este saco térmico impermeable te ayudará a retener el calor corporal y a evitar la exposición de la piel al aire frío.