Materia gris y blanca: Estructura y funciones
El cerebro humano es una estructura muy compleja. Además, hay partes del cerebro de las que todavía no sabemos mucho. Y lo que es más importante, la medicina y la ciencia aún no conocen la cura de numerosas enfermedades del sistema nervioso ni cómo reparar los daños.
A pesar de ello, los científicos han conseguido descubrir mucho sobre este misterioso órgano que es el nodo de nuestra personalidad y vida.
Dividir su estructura anatómica
en lóbulos, hemisferio izquierdo y derecho, y partes del cerebro nos ayuda a comprender
su estructura y, lo que es más importante, sus funciones y mecanismos de una mejor
manera.
Una clasificación muy común y significativa de las estructuras del cerebro se refiere a la diversificación de la materia gris y blanca. En este artículo, discutiremos la naturaleza de estos dos tipos de estructuras, sus diferencias, significado y funciones.
Por último, abordaremos diferentes afecciones, enfermedades y daños de la materia blanca y gris, así como sus consecuencias.
Materia gris frente a materia blanca
La materia gris es peculiar por contener los cuerpos celulares de las neuronas. El nombre científico de los cuerpos neuronales es soma (1).
La materia blanca es específica por contener axones mielinizados (1). Estas estructuras son relés largos. Se extienden desde los cuerpos neuronales. Como su color es blanquecino, estas estructuras se denominan materia blanca.
El color proviene de un alto contenido de grasa lipídica en la mielina. Esta estructura conecta las células cerebrales y se distribuye en tractos o haces.
Aunque ambos tipos de materia se disponen en todo nuestro SNC, es decir, existen tanto en el cerebro como en la médula espinal, debemos destacar un detalle. A nivel de sistema o clasificación, la división en materia blanca y gris es exacta.
Sin embargo, existen tipos celulares mixtos. Estos tipos existen tanto en la materia blanca como en la gris. Por lo tanto, las cosas no son muy blancas y negras (o grises y blancas), ni simples.
Contenido de la materia gris y blanca
Salvo estas diferencias básicas, es importante destacar el contenido de ambos tipos de materia. A saber, la materia gris contiene células gliales, tractos axónicos, neuropilas (glía, dendritas y axones no mielinizados), así como vasos sanguíneos capilares (1).
La sustancia blanca contiene las células gliales responsables de la producción de mielina (los oligodendrocitos) y los astrocitos (1).
¿Dónde se encuentra la materia gris?
La mayoría de las neuronas se encuentran en el cerebelo (1). Más concretamente, contiene más que todas las demás partes del cerebro juntas. La materia gris también está presente en la médula espinal.
Además, hay regiones en el
Sistema Nervioso Central que tienen una capa externa de la materia gris. Son, principalmente, el
cerebro y el cerebelo. Cuando se trata del tronco cerebral y su materia gris,
esta parte del cerebro contiene grupos de neuronas o núcleos incrustados dentro de
tramos de materia blanca.
¿Dónde se encuentra la materia blanca?
Los tractos de axones que representan la materia blanca se encuentran en su mayoría bajo las regiones de materia gris. Esto significa que se encuentran en zonas más profundas del cerebelo y del cerebro.
En otros casos, por ejemplo, los ganglios basales, la materia gris está incrustada en la materia blanca. Cuando se trata de los ventrículos cerebrales llenos de líquido, también están rodeados de materia blanca.
Es excepcionalmente interesante
echar un vistazo a la médula espinal y a la organización de la materia blanca y gris
en esta región. A saber, la materia gris forma una estructura en forma de mariposa
y está cubierta por la materia blanca.
La función de la materia gris y blanca
En primer lugar, la materia gris tiene un papel clave en el control de la actividad sensorial y muscular (1). Más concretamente, las regiones cerebrales que contienen predominantemente la materia gris están implicadas en estos procesos.
Por ejemplo, la corteza cerebral, que es la capa externa o estructura superficial del cerebro, está formada por columnas de materia gris que tienen la materia blanca colocada debajo de la materia gris. La corteza cerebral tiene varias funciones importantes.
Estas incluyen el aprendizaje, la memoria, los procesos cognitivos y la atención. Además, la función de la materia gris en el cerebelo está relacionada con el control motor, el equilibrio, la precisión y la coordinación.
Cuando se trata de la función de la
materia blanca, podemos decir que la mielina blanca grasa es importante para el
aislamiento de los axones. Esto permite un transporte de señales más rápido y afecta directamente a las funciones sensoriales y motoras normales.
Enfermedades de la materia gris
Los daños y enfermedades de la materia gris provocan importantes disfunciones de diferentes sistemas, principalmente las dificultades para interpretar la información sensorial, así como el sistema de recepción de información motora.
Como resultado, los pacientes sufren parálisis, debilidad muscular, así como sensaciones de hormigueo.
Cuando se trata del origen de estas enfermedades, se clasifican como enfermedades neurodegenerativas. Entre ellas se encuentran la demencia frontotemporal y la enfermedad de Alzheimer. Por desgracia, millones de personas en todo el mundo sufren estas enfermedades neurodegenerativas.
Aunque los cambios en la materia blanca también se encuentran en estas enfermedades, los científicos señalan que los ovillos neurofibrilares tau y las placas amiloides se localizan en la materia gris.
Es por ello que estas enfermedades se relacionan más comúnmente con los cambios en la materia gris que se encuentran en diferentes estructuras cerebrales. Además, como era de esperar, la parte del cerebro que pierde la mayor parte de las neuronas dicta la progresión de la enfermedad. En consecuencia, los síntomas de discapacidad motora de la enfermedad de Parkinson están relacionados con los cambios en la sustancia negra, etc.
Por último, debemos destacar otro grupo de daños en la materia gris. Son las lesiones de la médula espinal. Si los haces de axones que se encuentran en esta parte del sistema nervioso, es decir, la médula espinal están dañados, el enlace entre la materia gris de la médula espinal y el cerebro se pone en peligro o se pierde por completo.
Como resultado, el paciente puede sufrir problemas sensoriales, parálisis y otras disfunciones que pueden ser permanentes si hay daños en el cuerpo neuronal.
Enfermedades de la materia blanca
Aunque muchas enfermedades afectan tanto a la materia blanca como a la gris, es importante tener en cuenta qué enfermedades se producen como resultado de un daño o traumatismo o de cambios iniciales en la materia blanca o gris.
Por ejemplo, las enfermedades neuronales que provocan la interrupción del tránsito de las señales nerviosas se originan por cambios en la materia blanca. La razón es sencilla: la materia blanca es la responsable del buen y correcto funcionamiento del sistema nervioso.
Es interesante centrarse en la EM o esclerosis múltiple. Se trata de una enfermedad de la que aún no conocemos la cura. Sin embargo, los científicos están trabajando en ella y esperamos poder tratarla con éxito en un futuro próximo. Actualmente, sabemos que el revestimiento protector de los axones, formado por la mielina blanca y grasa, se destruye en los pacientes que padecen EM (2).
Como resultado, experimentan graves alteraciones sensoriales o motoras. Existen diferentes tipos de EM, así como diferentes estadios de la enfermedad. Algunos pacientes afirman que su condición va y viene.
La razón es el hecho de que la EM remitente-recurrente es una condición en la que la capa de mielina se pierde y puede ser reparada, pero desafortunadamente se pierde de nuevo, varias veces (2). Por otro lado, la EM progresiva conduce a una muerte neuronal causada por el daño axonal, que es un estado irreversible (2).
Además, hoy sabemos que la enfermedad de la materia blanca conduce a alrededor de una quinta parte de los accidentes cerebrovasculares. La razón es el hecho de que las enfermedades que afectan a la sustancia blanca también afectan a los vasos sanguíneos de la misma. Al igual que en los accidentes cerebrovasculares habituales, se endurecen e impiden que los nutrientes y el oxígeno lleguen a las regiones del cerebro.
Conclusión
La materia gris, que recibió su nombre por el color oscuro y grisáceo, contiene cuerpos celulares neuronales. Además, alberga las terminales de los axones, las sinapsis nerviosas y las dendritas. Las zonas del cerebro en las que predomina son el cerebro, el cerebelo y el tronco encefálico.
También se encuentra en la médula espinal. Concretamente, forma una estructura en forma de mariposa en su parte central. La parte posterior de esta estructura se conoce como cuerno gris dorsal. Es especialmente importante para pasar la información sensorial al cerebro a través de las señales nerviosas ascendentes.
La parte anterior de esta forma de mariposa se conoce como cuerno gris ventral. Se encarga de enviar las señales nerviosas descendentes a los nervios autónomos para gobernar las actividades motoras.
El daño de la materia gris, más concretamente del cuerno gris dorsal, puede dar lugar a dificultades en la interpretación de la información sensorial. Además, los daños en el cuerno gris ventral impiden el funcionamiento normal del sistema de recepción de información motora. Estas condiciones dan lugar a parálisis, debilidad muscular, así como a sensaciones de hormigueo.
La
materia blanca está formada por haces de axones. La característica clave es el revestimiento de mielina. La mielina es una estructura formada por una mezcla de lípidos y proteínas. Es responsable de la protección de los axones y de la conducción de las señales nerviosas a la médula espinal.
Si se daña la materia blanca, esto puede afectar a las funciones sensoriales, al movimiento y a las reacciones adecuadas a los estímulos externos.