¿Qué causa la EPOC?

En general, todas las formas de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), incluidos el enfisema y la bronquitis crónica, tienen su origen en los irritantes transportados por el aire que se inhalan.

Fumar y la EPOC

El tabaquismo es la principal causa de la EPOC, aunque los no fumadores también pueden contraer la enfermedad. Según la Asociación Americana del Pulmón, hasta el 90 por ciento de los casos de EPOC pueden estar causados por el consumo de cigarrillos. (1)

Por otro lado, los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que uno de cada cuatro estadounidenses con EPOC nunca ha fumado cigarrillos. (2)

Tabaco y bronquitis crónica

La bronquitis crónica se produce cuando los bronquios -vías aéreas que llevan el aire hacia y desde los pulmones- están constantemente irritados e inflamados.

El humo del cigarrillo contiene miles de componentes químicos. Cuando se inhala el humo del cigarrillo, las sustancias químicas irritan y activan ciertos glóbulos blancos (macrófagos) y las células que forman el revestimiento de las vías respiratorias (células epiteliales).

Esto hace que las células liberen múltiples tipos de citoquinas, que son pequeñas proteínas de señalización que hacen que el revestimiento de las vías respiratorias se engrose y que éstas se inflamen. (3)

La inflamación persistente de las vías respiratorias causada por el humo del cigarrillo puede provocar un ciclo de lesión y reparación que cambia la estructura de las vías respiratorias y las hace más estrechas.

El humo del cigarrillo también induce un efecto en cascada que hace que ciertas células produzcan más moco de lo normal.

Además, los irritantes disminuyen el número y la longitud de los cilios -apéndices parecidos a pelos que laten rápidamente para mover partículas, fluidos y mucosidad a través de las vías respiratorias.

Con los cilios incapaces de hacer su trabajo, la mucosidad cubre el revestimiento de las vías respiratorias, proporcionando un hogar para las bacterias, que pueden liberar toxinas que promueven la producción de mucosidad y dañan aún más los cilios.

Tabaco y enfisema

El enfisema se produce cuando los alvéolos -sacos de aire situados al final de los bronquios en forma de racimos- se dañan, haciendo que pierdan su elasticidad, lo que provoca una respiración dificultosa.

Se cree que la inflamación inducida por el humo del cigarrillo es una causa subyacente del enfisema, pero los procesos implicados no están claros.

Algunas investigaciones sugieren que ciertas células inflamatorias liberan enzimas que descomponen las proteínas responsables de la elasticidad alveolar. El humo del cigarrillo también puede inducir de algún modo la muerte celular programada (apoptosis) en las células alveolares.

También hay algunas pruebas de que el humo del cigarrillo provoca una respuesta autoinmune en la que el sistema inmunitario ataca el tejido alveolar. (4)

Dejar de fumar

La inflamación de las vías respiratorias podría continuar después de dejar de fumar, incluso tras un año de abstinencia, según un informe publicado en el International Journal of Environmental Research and Public Health. (5)

A pesar de ello, es importante dejar de fumar si se padece EPOC, ya que esto puede evitar la pérdida continua de la función pulmonar y reducir el riesgo de padecer una serie de otras enfermedades.

Hay numerosos medicamentos y recursos disponibles para ayudar a las personas a dejar de fumar, incluyendo:

  • Terapias de sustitución de nicotina, como chicles, parches e inhaladores de nicotina
  • Medicación para dejar de fumar, como bupropión (Wellbutrin, Zyban) and varenicline (Chantix)
  • Behavioral therapy
  • Tobacco quit lines, such as the National Cancer Institute (NCI)–operated 1-800-QUIT-NOW
  • Support groups, cessation classes, and self-help materials. Information is available on websites such as smokefree.gov.