Qué hago si mi perro se ha comido un hueso de pollo?

Sólo has salido de la cocina un minuto, pero cuando vuelves, ya es demasiado tarde. El pollo asado que acabas de sacar del horno ha desaparecido.

El único posible culpable está sentado en el suelo, jadeando, moviendo el rabo y pareciendo bastante satisfecho de sí mismo, como si la culpa fuera claramente del gato.

Te entra el pánico cuando te das cuenta de que tu perro también se ha comido los huesos de pollo. Lo llevas inmediatamente al veterinario?

Aquí tienes lo que tienes que hacer y vigilar si tu perro ha comido huesos de pollo.

¿Es malo que los perros coman huesos de pollo?

Los perros han estado comiendo huesos durante miles de años, y la mayoría de las veces, los procesan sin problemas.

Típicamente, los huesos de pollo se disuelven una vez que llegan al estómago – antes de que tengan la oportunidad de convertirse en peligrosos. La mayoría de las veces, los perros son capaces de eliminar los huesos de pollo sin problemas. Otros huesos, como los de ternera y cerdo, pueden causar mucho más malestar y enfermedades.

Sin embargo, existen algunos peligros potenciales para los perros que se ven tentados a comer huesos de pollo.

Potencial de obstrucción

Los huesos cocinados tienden a ser ligeramente más blandos que los crudos, pero algunos (como el hueso del muslo) pueden ser bastante grandes en relación con el tamaño del perro.

Si un perro traga -o intenta tragar- un hueso de pollo, y éste no llega hasta el fondo, puede quedar alojado en el esófago. Esto puede causar muchas náuseas, babas y arcadas.

En otros perros, el hueso puede atascarse en la parte superior de las vías respiratorias, ya sea en la parte posterior de la garganta (la faringe) o en el inicio de las propias vías respiratorias. Se trata de una emergencia inmediata en la que el perro mostrará importantes signos de angustia y podría toser fuertemente o tener problemas para respirar.

Riesgo de desgarro del tracto gastrointestinal

Los huesos de pollo se astillan con facilidad y, cuando se tragan, pueden provocar la perforación del esófago o del tracto intestinal.

Contaminación por bacterias

Sobre todo si el pollo está sin cocinar, su perro corre el riesgo de exponerse a bacterias como la salmonela.

Qué hacer si su perro se atraganta con un hueso de pollo

Si le preocupa que el hueso esté atascado en las vías respiratorias superiores o en el tracto intestinal superior, se trata de una emergencia y debe abordarse de inmediato.

Si es capaz de ver o agarrar el hueso para sacarlo, debe hacerlo siempre que pueda sin angustiar más a su perro o que se lastime o muerda.

Sin embargo, si no es inmediatamente visible, lleva a tu mascota al veterinario lo antes posible.

If you suspect that your dog has eaten a chicken bone and they display any of the following symptoms, take them to your veterinarian immediately:

  • Poor appetite
  • Vomiting
  • Diarrhea
  • Lethargy
  • Gagging or retching
  • Drooling
  • Coughing
  • Having trouble breathing

If your dog is active, is eating well and seems completely normal, it’s generally safe to simply monitor the situation.

As a rule, avoid feeding your dog bones altogether. If your dog does get ahold of a chicken bone and he appears distressed, act quickly and call an emergency vet.

If your dog seems to be acting completely normal, it will all probably come out fine in the end (pun fully intended!).

By: Dr. Sandra Mitchell, DVM

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