San Juan Neumann
Imagen: Iglesia católica de Santa Juana de Arco, Powell, Ohio (interior, vidriera) St. John Neumann | foto de Nheyob
Santo del día para el 5 de enero
(28 de marzo de 1811 – 5 de enero de 1860)
Historia de San Juan Neumann
Tal vez porque Estados Unidos empezó más tarde en la historia del mundo, tiene relativamente pocos santos canonizados, pero su número va en aumento.
John Neumann nació en la actual República Checa. Tras estudiar en Praga, llegó a Nueva York a los 25 años y se ordenó sacerdote. Trabajó como misionero en Nueva York hasta los 29 años, cuando ingresó en los Redentoristas y se convirtió en su primer miembro en profesar los votos en Estados Unidos. Continuó su labor misionera en Maryland, Virginia y Ohio, donde se hizo popular entre los alemanes.
A los 41 años, como obispo de Filadelfia, organizó el sistema de escuelas parroquiales para convertirlo en diocesano, multiplicando casi por veinte el número de alumnos en poco tiempo.
Dotado de una extraordinaria capacidad organizativa, atrajo a la ciudad a muchas comunidades docentes de hermanas y de Hermanos de las Escuelas Cristianas. Durante su breve mandato como viceprovincial de los Redentoristas, los situó en la vanguardia del movimiento parroquial.
Conocido por su santidad y su erudición, sus escritos espirituales y su predicación, el 13 de octubre de 1963, John Neumann se convirtió en el primer obispo americano en ser beatificado. Canonizado en 1977, está enterrado en la iglesia de San Pedro Apóstol de Filadelfia.
Reflexión
Neumann se tomó en serio las palabras de nuestro Señor: «Id y enseñad a todas las naciones». De Cristo recibió sus instrucciones y el poder para llevarlas a cabo. Porque Cristo no da una misión sin suministrar los medios para cumplirla. El don del Padre en Cristo a Juan Neumann fue su excepcional capacidad de organización, que utilizó para difundir la Buena Nueva. Hoy la Iglesia tiene una gran necesidad de hombres y mujeres que continúen en nuestro tiempo la enseñanza de la Buena Noticia. Los obstáculos e inconvenientes son reales y costosos. Sin embargo, cuando los cristianos se acercan a Cristo, Él suministra los talentos necesarios para responder a las necesidades de hoy. El Espíritu de Cristo continúa su obra a través de la instrumentalidad de los cristianos generosos.