Santa Teresa de Lisieux
Santa Teresa de Lisieux, también llamada St. Teresa del Niño Jesús o la Pequeña Flor, nombre original Marie-Françoise-Thérèse Martin, (nacida el 2 de enero de 1873 en Alençon, Francia, y fallecida el 30 de septiembre de 1897 en Lisieux; canonizada el 17 de mayo de 1925; fiesta el 1 de octubre), monja carmelita cuyo servicio a su orden católica romana, aunque poco destacable exteriormente, fue reconocido posteriormente por sus ejemplares logros espirituales. Fue nombrada doctora de la Iglesia por el Papa Juan Pablo II en 1997. Es patrona de las misiones y de los floristas.
Thérèse era la menor de nueve hijos, cinco de los cuales sobrevivieron a la infancia. Después de que su madre muriera de cáncer de mama en 1877, Teresa se trasladó con su familia a Lisieux. En el ambiente profundamente religioso de su hogar, su piedad se desarrolló temprana e intensamente. Sus cuatro hermanas mayores se convirtieron en monjas, y a los 15 años ingresó en el convento carmelita de Lisieux, tras haber sido rechazada un año antes. Aunque sufrió depresiones, escrúpulos -un sentimiento de culpa sin causa- y, al final, dudas religiosas, cumplió la regla a la perfección y mantuvo un trato sonriente, agradable y desinteresado. Antes de morir de tuberculosis, reconoció que, debido a su carácter difícil, no había pasado un solo día sin luchar. Su sepultura en Lisieux se convirtió en un lugar de peregrinación y se construyó allí una basílica con su nombre (1929-54).
La historia del desarrollo espiritual de Teresa se relató en una colección de sus ensayos epistolares, escritos por orden de las prioras y publicados en 1898 bajo el título Histoire d’une âme («Historia de un alma»). Su popularidad se debe en gran medida a esta obra, que transmite su amorosa búsqueda de la santidad en la vida ordinaria. Santa Teresa definió su doctrina del Pequeño Camino como «el camino de la infancia espiritual, el camino de la confianza y la entrega absoluta». Fue canonizada por el papa Pío XI en 1925 y fue la persona más joven en ser designada doctora de la Iglesia.
En 2015 los padres de Teresa, los santos Luis Martín y María Ángeles Guérin, fueron canonizados por el papa Francisco I; fueron los primeros cónyuges en ser canonizados juntos como pareja.