Anatomía de la columna vertebral 101

Anatomía de la columna vertebral 101

Publicado el 27 de junio de 2016

Aprende más sobre tu columna vertebral

Una explicación de cómo su forma puede estar afectando a su salud

En el Centro de Bienestar Dolor y Postura trabajamos principalmente con su columna vertebral. Usamos nuestras manos para empujar suavemente hacia atrás los huesos que se han salido de su lugar en dirección hacia adelante. La razón por la que «hacia adelante» es malo es que su cuerpo no tiene músculos que puedan tirar de estos huesos hacia atrás en su posición. Para entender mejor lo que hacemos o lo que queremos decir cuando decimos que vamos a trabajar en su «C7» o «L5», o cuando decimos que su columna se ha vuelto «plana», es útil echar un vistazo a cómo es una columna vertebral humana normal.

Las partes óseas de la columna vertebral

Su columna vertebral está compuesta por 24 huesos llamados vértebras. Empezando por la parte superior, hay 7 huesos del cuello. Los dos primeros tienen nombres especiales: «atlas», porque el hueso superior soporta el cráneo; y «axis», porque el segundo hueso permite girar la cabeza. Las 7 vértebras cervicales están numeradas de C1 a C7. Por tanto, cuando nos referimos a «C7», nos referimos al hueso más bajo del cuello, justo en la unión entre el cuello y los hombros. Si este hueso sale «hacia delante», hace que el cuello sobresalga. Si se adelanta mucho y se producen cambios compensatorios, puede provocar la formación de una joroba en la unión entre el cuello y los hombros.

A continuación vienen 12 vértebras torácicas (T1-T12) que forman la parte media de la espalda. Y luego tienes 5 vértebras en la parte baja de la espalda o columna lumbar. Éstas están numeradas como L1-L5. Por tanto, cuando decimos que hay que trabajar en la L5, nos referimos al hueso más bajo de la columna lumbar. Debajo de éste, en la base de la columna, hay una placa ósea llamada sacro. Está formada por 5 vértebras fusionadas. La parte inferior de la columna vertebral es el cóccix o coxis, que es un pequeño conjunto de 3 a 5 vértebras parcialmente fusionadas. Sumando el sacro y el cóccix, tu columna vertebral tiene 33 huesos en total.

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La médula espinal y los discos

Además de mantenerte erguido, la columna vertebral protege tu médula espinal. Este largo haz de nervios comienza en la base del cerebro (llamado tronco encefálico) y desciende dentro del canal espinal que está formado por las partes posteriores de las vértebras. Entre cada par de huesos de la columna vertebral, los nervios salen de la médula espinal y llevan mensajes a todas las partes del cuerpo.

Las vértebras individuales están separadas unas de otras por discos que proporcionan acolchado y amortiguación cuando el cuerpo se mueve. Cada vértebra se conecta con la de arriba y la de abajo a través de pequeñas articulaciones, creando así una unidad móvil. Si un hueso se desplaza fuera de su posición, estas articulaciones pueden quedar «atascadas», lo que a la larga puede provocar desajustes en toda la columna vertebral. Esta es la principal causa de las malas posturas. Esto, a su vez, puede conducir a un aumento de la presión mecánica en algunas partes de su columna vertebral. Si toman una radiografía o una resonancia magnética, los médicos pueden ver estos cambios estructurales en los huesos y los discos. A menudo los llaman «adelgazamiento» o «abultamiento» de los discos, «artritis», «degeneración espinal» o simplemente «desgaste».

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Entender la forma de tu columna vertebral

Una columna vertebral sana tiene una serie de cuatro curvas naturales, formando una forma de «doble S» cuando se ve de lado. Vista por detrás o por delante, la columna vertebral debe parecer recta. Esta forma proporciona una fuerza y un apoyo óptimos al cuerpo. Una columna vertebral sana te mantiene erguido frente a la gravedad y distribuye uniformemente el peso de tu cuerpo, sin que tengas que utilizar tus músculos para mantenerte en pie. Si estuviera completamente recta, la columna vertebral tendría problemas para soportar el peso del cuerpo. El objetivo es maximizar la estabilidad con el mínimo gasto de energía. Cuando todas las curvas de la columna vertebral se encuentran en su forma óptima, la columna está en posición neutra. La curva cervical normal se llama «lordosis» (curva hacia delante); la curva torácica se llama «cifosis» (curva hacia atrás); la curva lumbar es otra «lordosis», y el sacro y el coxis forman otra «cifosis».

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A medida que los huesos se desalinean, puedes perder la forma normal de estas curvas espinales. La curva cervical puede volverse plana, ya que la cabeza sobresale y la oreja se sitúa ahora por delante, en lugar de por encima, del hombro. La cifosis torácica puede ser exagerada y provocar una joroba en la parte superior o media de la espalda. Y la lordosis lumbar también puede aumentar, dando lugar a una espalda hueca. Otra posibilidad es que las curvas cervical, torácica y lumbar se reduzcan y se vuelvan demasiado rectas, lo que se denomina «columna militar». Si su columna vertebral desarrolla una curva lateral cuando se ve desde atrás, esto se llama «escoliosis».

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Todos estos diferentes cambios tienen una cosa en común: en última instancia, significan que su cuerpo no está funcionando de la mejor manera desde un punto de vista mecánico. El peso se distribuye de forma desigual, los músculos se tensan y pueden producirse cambios degenerativos en los huesos, las articulaciones y los discos. Las curvas anormales de la columna vertebral también hacen que la médula espinal se estire a través de los «pliegues» adicionales de la columna. Esto puede interferir en el funcionamiento de los nervios. Todos estos cambios pueden manifestarse, por ejemplo, en forma de dolor muscular, pinchazos en brazos o piernas, o dificultad para respirar (si, por ejemplo, las costillas no se mueven correctamente). Puede experimentar problemas de equilibrio, vértigo o mareos. El cerebro gasta la mayor parte de su energía simplemente en mantenerte erguido contra la gravedad. Si tiene que aumentar la energía necesaria para hacerlo porque tu columna está desalineada, puedes sentirte cansado o agotado todo el tiempo.

¡La Corrección Bioestructural Avanzada™ puede ayudar!

La buena noticia es que la Corrección Bioestructural Avanzada™ puede ayudar a restaurar las curvas normales de tu columna con el tiempo. Esto ocurre porque corregimos la posición de los huesos de la columna vertebral en relación con los demás. A medida que su estructura ósea se corrige, su postura mejora, el movimiento volverá a las articulaciones «atascadas», el estiramiento de los nervios se reduce, el dolor disminuye, y la función general de su cuerpo mejora.

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