[Neumonía química en niños]
Entre 1980 y 1989 el Hospital Infantil de Amberes ingresó a 954 niños con signos de intoxicación. En 83 casos (9%) se debieron a la ingestión de hidrocarburos, 17 de estos 83 niños (21%) tuvieron neumonía química. Los productos químicos más frecuentes fueron la trementina, la gasolina y el aceite para lámparas. Los principales síntomas fueron vómitos, erupción cutánea, tos y fiebre, acompañados de un hemograma infeccioso. Las anomalías de Roentgen en este grupo fueron menos frecuentes que las reportadas en la literatura. Una radiografía de tórax inmediatamente después del ingreso no siempre proporciona información sobre la neumonía porque las anomalías pueden estar ya presentes, por ejemplo, debido a una afección pulmonar aguda; no obstante, es necesaria para un estudio más detallado, si es que existe. Una radiografía a las 24 horas es indispensable para confirmar o excluir una neumonía química. En cuanto al tratamiento, sólo es posible una terapia de apoyo. Los estudios de la función pulmonar al cabo de unas semanas pueden ser útiles. Se presenta un estudio sobre la epidemiología, los hallazgos clínicos, el diagnóstico, la fisiopatología, la terapia sintomática, la prevención y el pronóstico.